viernes, 30 de noviembre de 2018

"ESAS EXTRAÑAS ESFERAS DE COLOR NARANJA" EN EL CAFÉ UFOLÓGICO RIO54 DE NOVIEMBRE



Estuvieron presentes en nuestra reunión del jueves 1 de noviembre de 2018, Darío Baicos, Luis Baynham, Elías Pessaj, Roberto Prieto, Lali Alvarez, Andrea Argüello, Cristian Vera, Diego Cantiano, Sebastián Araya, José Fandi, Isidoro Markus, Daniel Postizzi, Mabel Costea, Carlos Vales, Rubén Romano, Luis González, Aldo Barroso, Juan Failla, Elizabeth Nardini, Félix Di Lernia, Mirta E. Cenizo, Lucas Nardini, Mario Coen, Rolando Luna, Jorge Moauro, Osvaldo García, Patricia Sibar, Horacio Sorbaro, Elías A. Dabinovich, Hugo Cozzani, Ricardo Pérez, Víctor H. Martínez Jiménez, Norberto Iriarte, con la coordinación de Mario Lupo y Rubén Morales. Disculpas si en esta lista hemos olvidado a alguien!



El Café Ufológico reúne a personas afines en un clima de amistad.
En el Café Ufológico RIO54 de noviembre, realizado en el Restó Autoservicio Bellagamba de Av. Avellaneda esquina Eleodoro Lobos, le dimos la bienvenida a cinco nuevos participantes que se sumaron a nuestra apasionante mesa de conversación sobre ovnis y temas conexos. Se trata de Elías A. Dabinovich, Hugo Cozzani, Ricardo Pérez, Víctor H. Martínez Jiménez y Norberto Iriarte. Elías se dedica a la práctica de la meditación y ha tenido experiencias muy significativas que lo condujeron a acercarse a RIO54. Por su parte, el médico Hugo Cozzani relató una observación que compartió con su familia durante unas vacaciones en Villa Flor Serrana, cerca de la ciudad de Tanti en la provincia de Córdoba. Era una cálida noche de febrero de 1972, su abuela descansaba en una reposera al aire libre y de pronto anunció a los gritos que algo extraño estaba pasando. Toda la familia y otros ocasionales turistas pudieron ver las evoluciones de dos esferas amarillo-anaranjadas sobre la serranía cercana. Eran como dos lunas situadas una sobre la otra que conservaban la distancia entre ambas, ya que las dos "lunas" se desplazaban conjuntamente. Luego de unos 5 minutos los dos focos descendieron para quedar por unos instantes ocultos tras los cerros, para finalmente salir disparados hacia el cielo a una velocidad fantástica, hasta perderse de vista. "Fue una experiencia hermosa" comentó Hugo y remarcó que Flor Serrana tenía una trayectoria en manifestaciones similares, allí había realizado un estremecedor avistamiento el empresario Eugenio Diez (dueño de "Muebles Diez", famoso por haber construido el insólito chalecito en la terraza de la Av. 9 de Julio en Buenos Aires). El empresario había visto pasar flotando a un metro del suelo, prácticamente a su lado, un objeto alargado a modo de cigarro con una hilera de luces encendidas como si se tratara de ventanillas, que se alejó silenciosamente a ras del suelo… 

Como siempre sucede en el Café Ufológico RIO54, cada nuevo testimonio nos aporta revelaciones insospechadas que invitan a la reflexión, en este caso nos permitió saber que en localidades cordobesas muy poco conocidas como Flor Serrana también hubo importantes reportes de ovnis, aunque esas observaciones permanecen ignoradas por el ambiente ufológico, mientras que en lugares promocionados como "zonas calientes" para la casuística, son magnificadas, manipuladas y sobrevaloradas algunas observaciones mínimas, fácilmente explicables por causas comunes,  para reforzar la idea de que "esa es una zona ventana" o "un lugar energético donde se abren portales".

Los libros de Norberto Iriarte.
Luego se presentó Norberto Iriarte, autor de dos libros que relacionan las culturas originarias de América con la temática ovni: "La profecía del espejo negro" y "El presente no existe". Norberto nos confió varias observaciones interesantes, en particular una sucedida en Buenos Aires en el año 1962. La escena tuvo lugar en una solitaria parada de colectivos, en la zona sur de la ciudad (calles Laguna y Directorio, más precisamente) hacia la una de la madrugada. Tanto él como otras personas que estaban esperando el colectivo 7 se sorprendieron al ver que ellos y toda la zona quedaron de pronto iluminados por una poderosa luz blanca durante tres o cuatro segundos, como si fuera un potente flash fotográfico sostenido. Pasado ese lapso, todo volvió a la normalidad nocturna, desconociéndose el origen del curioso fenómeno.

Como sucede de manera totalmente espontánea, cada cita del Café Ufológico RIO54 tiene su propia impronta, siempre llegan profesionales en diversas especialidades y en esta oportunidad coincidieron en llegar a nuestra mesa varios médicos con intrigantes anécdotas para compartir. Tal es el caso de Víctor Hugo, originario de Bogotá, Colombia, apasionado observador del cielo, que se refirió a un episodio vivido por su padre en agosto de 1977. Repetidas veces su padre le ha contado esa historia que jamás pudo explicarse. El hombre era oficial del ejército, en una misión que consistía en llevar materiales de construcción desde Villavicencio hasta un pequeño pueblo perdido en la sabana colombiana donde se estaba edificando una iglesia católica. El traslado se realizaba en un camión por una penosa ruta de tierra en muy mal estado donde el vehículo se atascó dos veces. El camión era conducido por un suboficial experimentado y lo acompañaba en la cabina el entonces joven oficial a cargo del operativo. En la parte trasera iba la carga de bolsas de cemento y un grupo de soldados de custodia. Pasaron varias cosas, por ejemplo en medio del solitario camino hallaron a una señora y su hijo y los invitaron a subir al camión para acercarlos. En determinado momento la mujer y su niño agradecieron y pidieron bajarse. Al seguir avanzando, los tripulantes del camión cayeron en la cuenta de que en ese lugar no había ningún poblado, ningún caserío, a dos horas de viaje del primer sitio habitado donde hubieran podido refugiarse.
Llegó la noche y el camión comenzó a ser escoltado por una esfera rojo-anaranjada flameante, que acompañó al vehículo durante más de media hora. Todos en el camión estaban aterrados, y el veterano chofer le pedía insistentemente al joven oficial que no mirara la luz porque era una "candileja", un alma en pena según los mitos rurales colombianos. Pero el oficial, con otra formación cultural, entendía que esa luz debía estar relacionada con el llamado fenómeno ovni. Aquí vemos claramente cómo ante un mismo suceso hay dos testigos y dos interpretaciones diferentes que dependen de sus marcos de referencia previos. Esta anécdota pone en evidencia (y con mucha simpleza) las hipótesis defendidas por autores como Jacques Vallée o Bertrand Méheust de que los prodigios que antiguamente integraban los mitos folklóricos tradicionales hoy son interpretados como ovnis o naves extraterrestres, en concordancia con la cultura tecnológica del presente.

Rubén Romano, Carlos Vales, Rubén Morales y Juan Failla, en RIO54.
Luego el arquitecto y economista Elías Pessaj habló de experiencias trascendentes vividas en sueños que le han dejado enseñanzas profundas, entre ellas la indicación de ofrecer al público su historia para contribuir a que todos podamos hacer pequeños cambios que en conjunto pueden cambiar el mundo.

Los reconocidos ufólogos Rubén Romano y Carlos Vales anunciaron que van a dictar una charla titulada "El fenómeno ovni, un sistema holístico" el domingo 9 de diciembre  a las 16 en el Café Ufológico Bienvenidos Tripulantes que se reúne en el café Cabo Polonio de Marechal y Ferrari, Villa Crespo.

Habla Elías Pessaj y la atenta escucha de los asistentes.
Finalmente la charla se orientó a destacar los aspectos filosóficos y humanos que entrañan al conjunto de testimonios sobre ovnis, contactos, abducciones, etc. El Co-Coordinador de RIO54 Mario Lupo reflexionó que no somos seres terminados, estamos en plena evolución, tenemos un sistema de creencias y -dentro de ese proceso- podemos acceder a determinados deslumbramientos, revelaciones, descubrimientos intelectuales o espirituales que nos llevan a un cambio de conciencia. En el mismo sentido mencionó autores como Néstor Berlanda y Dennis Stillings y concluyó que el Café Ufológico RIO54 se caracteriza por ser un espacio plural que da cabida a todas las expresiones derivadas de estas temáticas, un colectivo donde prevalece la diversidad de opinión, y justamente esa apertura a convivir con la diversidad termina enalteciendo el pensamiento, permite ascender en el nivel de comunicación, contribuyendo -en suma- a nuestra propia realización personal.

Vista parcial de la concurrencia al Café Ufológico RIO54.

Y aquí cerramos este breve resumen de los temas abordados en el Café Ufológico RIO54 de noviembre. La próxima reunión, y ¡última del año! será el jueves 6 de diciembre como siempre el primer jueves de cada mes a las 18:30 en el restó autoservicio Bellagamba de Avellaneda y Eleodoro Lobos, barrio de Caballito, Ciudad de Buenos Aires. Recordamos que solo se abona la consumición como en cualquier local gastronómico y es necesaria una consumición por persona, también como en cualquier restó. Las reuniones no se filman ni se graban y si alguien lo hiciera es bajo su absoluta responsabilidad, solo tomamos unas fotos para ilustrar breves resúmenes como éste. Hasta el jueves 6 de diciembre!