En RIO54 siempre decimos que nos reunimos para hablar de “ovnis y temas conexos”, pero “conexos” es una expresión amplia que siempre tiene su cuota de incertidumbre, así que en esta oportunidad se tocaron temas tan diversos como astronomía, ufología, mitos, apariciones, abducciones, predicciones y exorcismos.
En principio, Morales comentó la novedad de que el actual intendente de Capilla del Monte, Fabricio Díaz, resultó ser el primer funcionario de esa jerarquía que participó en un Café Ufológico, lo hizo en el de Rosario que está coordinado por Lorena Sciarratta. En esa misma reunión anunció que promovería un café ufológico en Capilla del Monte mediante una ordenanza municipal, lo cual sería un precedente para que logren el merecido reconocimiento oficial los diversos cafés ufológicos que se han establecido espontáneamente en distintas localidades argentinas y del exterior. Luego, ya en Capilla del Monte, Díaz impulsó y participó también en el denominado Café Ufológico Uritorco que fue coordinado por Claudia Banyik y Fernando Zecca. Entretanto, no se conoce que se haya promulgado la referida ordenanza ni se tienen detalles sobre la letra de su texto.
Pablo Basso -quien se dedica a la fabricación de planetarios móviles- expresó que en sus conversaciones habituales con astrónomos, todos coinciden en que la vida ha de ser un fenómeno extendido en el Universo, pero también le dicen que no han tenido oportunidad de ver algo inusual a través del telescopio. Recordó que el físico Stephen Hawking había advertido que “en caso de encontrar extraterrestres, nunca tratemos de hacer contacto con ellos”. Pablo, en cambio, prefiere suponer que si hay seres más evolucionados deben estar guiados por el amor y no por la maldad. Relató una experiencia que le sucedió el pasado 12 de diciembre junto a unas 30 personas que cruzaban el Lago Buenos Aires en una barcaza, en Chile Chico, Patagonia Chilena. Era una noche diáfana, perfectamente despejada y desde esa latitud austral se destacaban nítidas las dos galaxias denominadas Nubes de Magallanes. Venus brillaba con notable intensidad. A su costado y por encima del espejo de agua se comenzó a ver una luz que iba, venía, retrocedía, avanzaba, unos movimientos que no le resultaron compatibles con nada conocido.
Luego le dimos la bienvenida al reconocido psicólogo y parapsicólogo Alejandro Parra, quien dijo que en los relatos de observaciones de ovnis hay un alto componente psicológico, por tratarse de un fenómeno perceptual cognitivo. Más allá de esos relatos el fenómeno permanece como un inobservable que nos plantea la cuestión epistémica sobre lo que sabemos y lo que no sabemos. Añadió que buena parte de tal incertidumbre se debe a la lamentable calidad de las entrevistas a testigos que pueden verse en numerosos videos disponibles en internet, con preguntas tendenciosas y orientadoras que solo buscan confirmar el sesgo cognitivo del entrevistador.
Por su parte, Carlos Vales comentó que junto a su equipo está realizando investigaciones de campo especialmente en casos de encuentros cercanos del tercer tipo, para lo cual se están desplazando a distintos lugares del país.
Elizabeth Nardini, otra consecuente integrante del Café Ufológico RIO54 dijo que solo una vez en la vida, cuando tenía 13 años, tuvo una observación realmente extraña: Junto a muchas personas que estaban en la calle contempló algo así como un conjunto de estrellas en el cielo que tomaban movimientos en diferentes direcciones. Con respecto a la naturaleza de estos fenómenos, su deducción es que tenemos limitaciones de percepción, que hay muchas cosas que suceden a nuestro lado sin que las veamos, y que cada tanto se abre una “ventanita perceptual” que nos permite acceder a esa otra parte de la realidad. Agregó además que recientemente vio el paso de la estación espacial china Tiangong sobre Buenos Aires y le sorprendió la intensa luminosidad que emite.
Desde Sidney, Horacio Gómez nos contó que los relatos mitológicos de las culturas aborígenes australianas tienen incorporados a los extraterrestres desde hace 45.000 años, “en Australia los extraterrestres dejaron su huella” -enfatizó.
Como anécdota, relató que hace más de 20 años el psiquiatra John Edward Mack dio una conferencia en Sidney sobre el tema abducciones, y cuando preguntó al auditorio si alguno de los presentes había sido abducido, ¡casi todos levantaron la mano! Añadió que es necesario considerar seriamente el “Pacto de Grenada” de Eisenhower en 1953 relacionado con los controvertidos documentos del MJ 12.
A raíz de lo dicho por Horacio, Mario Lupo reflexionó que en conferencias, congresos o cafés sobre estos temas muchas personas encuentran un lugar confiable para exponer masivamente estas experiencias a las que consideran sumamente privadas por el trauma y el temor que les causaron. Luis Baynham evocó la historia de abducción que tuvo como protagonistas a Linda Cortijo y al diplomático peruano Javier Pérez de Cuéllar, historia que fue relatada por el escritor Budd Hopkins. También vino a su memoria la mucho menos conocida pero alucinante experiencia de un médico bonaerense que mientras estacionaba su auto en el garage como todos los días, descubrió un extraño ser luminoso parado en un rincón que no le quitaba los ojos de encima. Ese episodio nunca salió a la prensa y solo fue conocido gracias al testimonio de un familiar del médico que estuvo en el Café Ufológico RIO54.
Walter Vicario, quien había participado en alguna de las reuniones de RIO54 en el legendario Café de La Subasta, contó que desde hace 32 años se dedica a hacer exorcismos y que algunos casos de posesión son muy similares a los de abducción extraterrestre o de “visitantes de dormitorio”. Puso como ejemplo a una mujer de 45 años que quedó embarazada pese a tener ligadas las trompas luego de la aparición nocturna de dos hombres que le inyectaron un líquido. Vicario afirma que para hacer los exorcismos, temporariamente logra desdoblarse y vibrar como la entidad ocupante para luego expulsarla y extraer los “implantes” que hubiera en el “plano astral” del sujeto poseído. Relató también que un oficial de la Base Puerto Belgrano le dijo que el lamentable incendio del buque Almirante Irízar que lo dejó inactivo durante varios años se debió a un ataque de dos “naves” en proximidad del Círculo Polar Antártico. Sebastián Araya remarcó la necesidad de investigar estos temas desde el punto de vista de la seguridad nacional, como se hace en Estados Unidos.
Rubén Calabrese recordó con emoción las largas charlas que pudo compartir con referentes de la ufología como Pedro Romaniuk y Fabio Zerpa, así como valoró en especial la amistad de Juan Carlos Spadafora.
También, cuando vivió en Toronto por razones laborales, tuvo frecuentes intercambios con el investigador estadounidense Stanton Friedman. Su conclusión es que el fenómeno ovni es físico y real, aunque puede haber diversas hipótesis sobre su naturaleza.
Luego nuestra querida Lali, permanente participante del Café Ufológico RIO54 abordó un tema que había sido tocado antes en la conversación, acerca de ciertas personas que dicen no ser de este planeta y eventualmente llaman la atención por algún detalle físico o de comportamiento. Mencionó el caso de un joven de 16 años sumamente retraído, poco sociable, que afirmaba no ser de la Tierra. Una noche caminaba junto a varias personas por un barrio tranquilo y de pronto gritó: “¡Deténganse! Una camioneta subirá a la vereda y chocará contra esa luminaria”. Segundos después sucedió exactamente lo que predijo, ante el asombro de todos que evitaron ser embestidos gracias a su anuncio.
Y así fue discurriendo este café ufológico virtual de enero, entre temas diversos y atrapantes. Esperamos retomar las reuniones presenciales continuadas, aunque ya hay varios amigos y amigas de distintos lugares del país que nos piden que RIO54 se desdoble en reuniones virtuales y presenciales para poder seguir estando todos comunicados.
¡Abrazo y hasta la próxima!
