lunes, 20 de agosto de 2018

UNA PREGUNTA CLAVE EN RIO54: ¿CUÁLES SON LAS PRUEBAS DE QUE LOS ALIENS NOS VISITAN?





Estuvieron presentes en nuestra reunión del jueves 2 de agosto de 2018, Carmen Castro, Mabel Costea, Carlos Vales, Mario Coen, Elizabeth Nardini, Lucas Nardini, Rubén Romano, Luis González, José Fandi, Miguel A. Chaile, Isidoro Markus, Ana Serrano, Luis Baynham, Daniel Postizzi, Diego Cantiano,  Aldo Barroso, Lali Alvarez, Orlando Burgos, Sofía Poeta, Joaquín Lopumo, Estela González, Javier Ayala, Edgardo Picchiquini, Hilario, Franca Malvermi, Daniel Guerrero, Karina Zabala, Abel Leguizamón, Patricia Sibar, Andrea Argüello, Edgardo Stekar, Miguel Arjona, Horacio Sorbaro, Carlos Spinelli, Jorge Moauro, Javier Stagnaro, Leandro Ferrón, Osvaldo García, Norberto Kreiman, con la coordinación de Mario Lupo y Rubén Morales. Disculpas si en esta lista hemos olvidado a alguien!

Más de 40 participantes tuvo el Café Ufológico RIO54 de agosto, nuevamente en el restaurante autoservicio Bellagamba ubicado en la esquina de avenida Avellaneda y Eleodoro Lobos, Ciudad de Buenos Baires, un punto de encuentro donde fluye la conversación acerca de los ovnis y los temas conexos que nos apasionan, en un agradable restó que nos ofrece un menú variado con precios accesibles. 

Abrió la reunión Rubén Morales para comunicar que recientemente realizó una visita a la ciudad de Capilla del Monte (Pcia. de Córdoba) donde participó en una de las amigables Cenas Ufológicas que coordina mensualmente Alejandro Pratt y, por otra parte, en un local de la calle techada Rubén dictó una conferencia qué fue cabalmente organizada por Claudio Chena, coordinador del Café Ovnis Uritorco. En esa conferencia se anunció la reciente desclasificación de un expediente británico donde por primera vez el Reino Unido reconoce oficialmente que el 2 de julio de 1965 fue observado un ovni desde la "Base B" en la Isla Decepción, lo cual es la confirmación oficial de uno de los más destacados casos analizados en el libro "Los ovnis de la Antártida". Y el documento inglés aparece recién ahora, pasado más de medio siglo de aquellos acontecimientos que conmovieron a la opinión pública mundial. 

Se presenta Norberto Kreiman.
Acto seguido se le dio la bienvenida a dos nuevos participantes del Café Ufológico RIO54, Hilario y Norberto. Hilario destacó la oportunidad de encontrar aquí un grupo de personas dispuestas a hablar libremente sobre ovnis y temas relacionados. Norberto Kreiman coincidió en no tener historias de ovnis para contar, pero sí recuerda que en su infancia era capaz de ciertas habilidades espontáneas que bien podrían considerarse paranormales, tales como sentarse en una silla y reclinarse hacia atrás, hasta que la silla quedaba perfectamente equilibrada en dos patas por largos minutos. También recuerda que estando de pie y manteniendo los pies juntos, sin moverlos, era capaz de caminar. Cuando llegó a los 10 o 12 años tales destrezas desaparecieron de pronto y no pudo repetirlas por más que lo intentó.

Ya hubo otros participantes de nuestras reuniones que relataron vivencias muy curiosas sucedidas en su infancia, que las recuerdan como absolutamente reales pero que nunca se repitieron en años posteriores. Abel Leguizamón citó al ufólogo y psiquiatra rosarino Néstor Berlanda, quien se ha referido a la incidencia de la melatonina como estímulo de la glándula pineal durante la niñez, ya que esa sustancia decrece con la pubertad, manteniendo baja concentración en sangre en el resto de la vida adulta.

A continuación Edgardo Picchiquini presentó socialmente en el Café Ufológico RIO54 su libro "Aquieta tu mente", que tiene como subtítulo "La nueva espiritualidad del mundo que viene" (Dunken 2018, 270 páginas). La idea de escribirlo le sobrevino luego de un terrible accidente laboral. En el año 2012 estaba haciendo refacciones en el techo de una fábrica y cayó desde 8 metros de altura, sufriendo múltiples lesiones que lo retuvieron cinco meses en un hospital. No es la primera vez que un hecho traumático es el origen de un despertar mental o espiritual, recordemos que Carlos Paz García (el padre de Sixto Paz Wells) era un corredor de motos que luego de una violenta caída comenzó a dedicarse a los ovnis, siendo el creador del Instituto Peruano de Relaciones Interplanetarias (IPRI). Otro grave accidente tuvo el francés Claude Vorilhon cuando era corredor automovilístico antes de convertirse en el "profeta Raël". El propio Pedro Romaniuk explicaba que su conversión espiritual sobrevino en 1947 al estrellarse en Palomar el avión que pilotaba. Lo internaron en un hospital con todos los huesos rotos, los médicos lo desahuciaron, y comenzó a escuchar una voz que entre otras cosas le decía "Has nacido hoy, verás extraños acontecimientos…" Solía relatar Don Pedro que en 7 días estuvo totalmente curado y ese fue el inicio de su trayectoria místico-ufológica.

Edgardo Picchiquini explica los motivos que lo llevaron a escribir su libro.
El nuevo libro de Picchiquini contiene y comenta numerosas citas bíblicas, fundamentadas en la formación bautista de su autor, pero no se trata de un libro de mera difusión evangélica, tiene párrafos críticos hacia la religión, rescata versículos que muchos predicadores eluden, por ejemplo esos Cantares de Salomón con claras expresiones de tono erótico, esos pasajes del Génesis que hablan de uniones entre seres angelicales e "hijas de los hombres" así como relaciona las apariciones luminosas celestiales con experiencias ufológicas.

Plantea, por ejemplo, que Dios no es una entidad, un ser, sino un estado de conciencia que nos comprende a todos, todos somos dioses en potencia, aunque solo una pequeña parte de la sociedad se preocupa por su crecimiento interior. Y describe a Jesucristo como el Híbrido, poseedor de una componente terrena y de otra celestial, quien bien dijo "yo no soy de este mundo". El libro incluye otras definiciones conceptuales que van más allá del relato habitual en la tradición evangélica o católica.

Javier Stagnaro y Mario Lupo, siempre firmes en la amistad ufológica.
Edgardo añadió que le vino a la mente autodefinirse como "un profeta de silicio", lo que interpreta como un profeta de los tiempos que corren, en la era tecnológica del silicio. En suma, "Aquieta tu mente" es un libro que hace una amalgama de conceptos bíblicos, ufológicos y de diversos credos, matizados con anécdotas biográficas de su autor. A través de sus páginas va delineando un camino cuyo mensaje final es un decidido llamado a la espiritualidad.

Luego tomó la palabra el inventor José Fandi, que a sus 91 jóvenes años es uno de los más entusiastas seguidores del Café Ufológico RIO54. Planteó la necesidad de establecer conjeturas acerca de cómo serían los visitantes extraterrestres que hipotéticamente llegan a la Tierra. Alguien le interrumpió para decirle que la presencia alien en nuestro mundo ya está fuera de duda, a lo que Fandi retrucó con un interrogante: En tal caso ¿cuales son las pruebas? ¿tenemos realmente alguna evidencia concreta, capaz de convencer a la comunidad científica, de que hay extraterrestres entre nosotros?.

Digámoslo de otra manera ¿hay algún caso ovni acerca del cual todos los investigadores coincidan de manera unánime en que se trató de una presencia extraterrestre? ¿o hay algún resto caído a tierra, alguna evidencia física de la cual se tenga certeza de ser un producto de factura alienígena, imposible de realizar con la tecnología actual?
José Fandi, 91 años y nuevos interrogantes.

Y las preguntas no son vanas, porque van más allá de que existan fenómenos aéreos sin explicación: Eso es más sencillo de entender, ya se sabe, en todas las ciencias, en cada época, siempre quedan aspectos resistentes a ser explicados. Los físicos, los astrónomos y hasta los psiquiatras y neurólogos saben bastante de eso!. Pero una cosa muy diferente sería probar de manera fehaciente las visitas de seres extraterrestres. Obviamente probarlo no es un asunto de palabras, no alcanzan las declamaciones verbales de quienes aseguran haberlos visto, de quienes dicen recibir mensajes, de quienes obtienen fotos o videos que admiten más de una interpretación. ¿Cual sería esa evidencia irrefutable, esa piedra de toque que despejaría toda duda sobre la presencia de visitantes cósmicos en nuestro mundo?

En primer plano, Rubén Romano y Rubén Morales.
Seguramente las primeras respuestas que lleguen a nuestra mente estén muy lejos de conducir a la dirección correcta, pero en ese interrogarse reside la esencia del Café Ufológico RIO54, un lugar donde el encuentro con otros nos lleva a preguntarnos, a cuestionarnos, nos arroja a la diversidad de ideas, enriquece nuestro pensamiento al sacudir algunas estructuras mentales a las cuales nos habíamos malacostumbrado en el error de suponer que todos las compartían por igual y no hay razón para que sea así. El Café Ufológico es una caja de resonancia donde se expresan todas las ideas, desde las ultra racionales hasta las que parecen más delirantes, es un espacio de conocimiento mutuo a través de la conversación, sin que se valide o descalifique el pensamiento del otro. 

Naturalmente, cada cual se hace cargo de lo que dice, en tanto el Café Ufológico no es un grupo que se aferre o defienda una corriente de opinión determinada, simplemente es un espacio de charla amigable en la diversidad. Nadie es dueño de toda la verdad, en cambio tenemos la certeza de que cada uno de nosotros posee alguna parte de la misma. Es como si cada uno de nosotros tuviera piezas sueltas de un gigantesco rompecabezas, las que vamos dejando sobre la mesa cuando llegamos al café y a medida que las acomodamos se va dibujando la figura oculta, se va descifrando el enigma que nos convoca a reunirnos cada primer jueves de mes desde hace ocho años, desde 2010 cuando Mario Lupo y Rubén Morales lanzaron el Café Ufológico RIO54.

Y la próxima oportunidad será el 6 de septiembre a las 18:30 nuevamente en Bellagamba, Avellaneda 399 esquina Eleodoro Lobos, barrio de Caballito, Ciudad de Buenos Aires. Recordamos que solo se abona la consumición como en cualquier local gastronómico y es necesaria una consumición también como en cualquier restó. Las reuniones no se filman ni se graban y si alguien lo hiciera es bajo su absoluta responsabilidad, solo tomamos unas fotos para ilustrar breves resúmenes como éste. Hasta entonces!











4 comentarios:

  1. Soy ingeniero, no es que sea algo especial serlo pero a través de los años aprendí que la profesión se va ganando a medida que uno se especializa y esfuerza en ser mejor persona a través de más de 40 años de experiencia.
    No hace mucho me intereso en estos temas misteriosos, pero como siempre ha sido una regla en mi vida, cuando hago algo lo hago de corazón y le pongo todo el empeño que puedo.
    El título de hoy me hizo recordar una experiencia que tuve hace algunas semanas, con un notable investigador más retractado al escepticismo y asesor de muchos grupos privados y oficiales en el mundo y su contraparte también investigador y con la misma orientación en Argentina.
    Frente a una de las publicaciones de este señor me permití enviarle un mensaje privado para relatarle mi experiencia en la Patagonia austral, motivo del enunciado que existían unos archivos extraviados que justamente se encuentran allí.
    Grande fue mi sorpresa al recibir por respuesta un insulto, me trató de "imbécil" cuando mi trato fue respetuoso, y lo que más me indignó fue la descalificación de compartir mi mensaje con otros locales de su misma calaña.
    Se hablaba de estos temas justamente, de las pruebas y los reportes documentales, bibliotecas especializadas y del trabajo que algunos hacen en la reserva de su actividad.
    La realidad es que pruebas hay, varias y buenas, pero cuando se trastabilla en los medios de divulgación masiva todo parece difuso y ninguno de quien las posee las presenta.
    Pareciera que hay algo más detrás de la barda, algún efecto que impone reserva, silencio y mesura al momento de presentar algo, y de hecho la mayor parte de ello está fuera del alcance de nosotros los novatos.
    Conocí a alguien en esos caminos perdidos del norte argentino y frente a estos asuntos me decía "no lo sé ni quiero saberlo", con un toque de suficiencia y otro de precaución; frente a ello me pregunto ¿queremos saber de verdad?, o ¿solo nos es suficiente mantener el misterio?.
    Tal vez es como quien busca y busca pero sabiendo toda la intriga y maravillas de la mitad del camino, y aún sabiendo la respuesta no quiere llegar a ella para que no se termine.
    Probablemente habría que poner esto sobre la mesa de algún psicólogo o de algún psiquiatra, porque a muchos la mente nos juega complicados rumbos.
    Pero de la verdad a la realidad hay solo un paso, la verdad muchas veces se acomoda a cada uno pero la realidad es una sola aunque muchos digan que depende del ángulo del cual se percibe.
    Aquí la realidad es que fuera de las charlas, ideas compartidas, fotografías y teorías de toda clase, hay quienes se dedican a esto hace muchos años y apenas asoman sus narices en la vida pública... y a éstos casi nunca le van a preguntar si tienen alguna prueba sobre la existencia y si las quiere compartir.

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  2. Gracias por el comentario Elías, interesantes reflexiones, abren el pensamiento en varios aspectos, y si alguien tiene pruebas de algo sería bueno las ponga sobre la mesa por una cuestión de honestidad intelectual sin esperar que nadie se lo pregunte. Porque -también- en la ignorancia corremos el riesgo de preguntar a la persona equivocada. Y también es lícito tener la sospecha de que había gente que atesoraba ciertas verdades, temió decirlas y se las llevó a la tumba. Y eso no fue bueno para ellos que ya no están, ni para nosotros que seguimos estando. Pero sobre todo no es bueno para esas verdades que merecían ser comunicadas.

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  3. Pregunto hasta que hora duran las reuniones yo salgo de mi trabajo a las 20hs y tengo una hora de viaje llego bien?

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    1. comienzan a las 19 y terminan las reuniones entre las 21 o 21 30 horas....

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