Café Ufológico RIO54 de septiembre: ¿Existió una humanidad con alta tecnología hace milenios?

Estuvieron presentes en nuestra reunión del jueves 5 de septiembre de 2019, Gerardo López, Miguel Arjona, Mabel Costea, Karina López, Lali Alvarez, Estela González, Milagros Correa Hierschfeld, Sebastián Araya, Nilva Macedo, Isidoro Markus, Carlos Vales, María Maskin, Tito Vicente Rótolo, Celeste Chiesa, Eduardo Urrutia,  Adriana Urrutia,  Alejandro Merel, Enrique Marini, Alberto Portalet, Roberto Prieto, Daniel Zapata, Marta Fuster, Elizabeth Nardini, Carlos Spinelli, Angeles Castro, Luis González, Osvaldo García, Alejandro De La Barra, Alexis Ruffat, con la coordinación de Rubén Morales (Mario Lupo estaba de viaje en esta oportunidad). ¡Disculpas si olvidamos a alguien!

El Café Ufológico RIO54 tuvo una impactante reunión de septiembre, con muchos amigos y amigas que compartieron nuestra mesa en el mes de la primavera, también circularon historias increíbles y llegaron dos nuevos participantes internacionales, uno originario de Francia y otro de Ecuador.

Rubén Morales habla en el inicio del encuentro de septiembre.

Luego de las palabras iniciales del Co-Coordinador Rubén Morales, se dio comienzo al encuentro con la presentación de Alexis Ruffat, piloto francés, que se ha desempeñado en África, China y Canadá antes de llegar a la Argentina. Explicó que más allá de tener un interés intelectual en estos temas, su única vinculación con el ámbito ufológico es un buen amigo, Serge Tinland, quien le pidió encarecidamente que si viajaba a Buenos Aires ¡debía visitar en su nombre el Café Ufológico RIO54 para transmitir su saludo a los colegas de Argentina!. ¡Gracias Serge!

Alexis Ruffat durante su presentación en RIO54

Serge Tinland es un ufólogo francés, autor del libro  "Los invisibles de Col de Vence". Col de Vence es una zona elevada, cerca de Niza, no muy lejos del Mar Mediterráneo, donde desde hace décadas se reportan observaciones de luces extrañas, por lo cual se ha convertido en un lugar muy famoso al que habitualmente concurren entusiastas de las vigilias nocturnas. Para ejemplificar, Col de Vence es en Francia una zona equivalente, salvando todas las diferencias, a Capilla del Monte en la Argentina.

También llegó por primera vez Eduardo Urrutia, quien es ecuatoriano, es licenciado en historia y actualmente cursa una maestría de estudios históricos arqueológicos en la Universidad de Buenos Aires, se presentó diciendo: "Es algo muy nuevo para mi conocer la cultura argentina, una cultura que podría decirse es muy europea". Comentó después que junto a su hermana Adriana (también presente en esta reunión) fueron los creadores del Café Ufológico de Quito, tomando como base el modelo del Café Ufológico RIO54 de Buenos Aires, ya que Adriana había sido una activa participante de las reuniones de RIO54 en el año 2016.

Expresó Eduardo que le interesan en particular esas historias ocultas que no son contadas por la historia oficial, pero siempre con objetividad, centrado en los hechos, tratando de analizar las conexiones entre culturas, por ejemplo entre mayas y egipcios que pese a las distancias muestran sugerentes paralelismos. Le apasiona investigar el difusionismo cultural que parece haber existido en tiempos muy remotos. 

Eduardo Urrutia expone sobre el enigma de la Cueva de los Tayos.

También ha indagado ese gran misterio ecuatoriano que es la Cueva de los Tayos, de hecho lo ha tomado como el tema de tesis final para su maestría en la UBA. Cabe remarcar la importancia de que Eduardo haya elegido Los Tayos como motivo de un trabajo académico, ya que como tal merecerá la evaluación de un jurado docente y la calificación por parte de las autoridades universitarias. En otras palabras, acciones como ésta -con indudable valentía intelectual- contribuyen a elevar estos temas a nivel universitario, tomando una sana distancia de los enfoques esotéricos, oscurecedores y sensacionalistas con que vulgarmente se los promociona.

Explicó que esa caverna no es de fácil acceso, se encuentra en plena selva de la Amazonía Ecuatoriana, en la Provincia de Morona Santiago, una zona que está bajo el control de la antigua comunidad indígena de los Shuar, una de las etnias menos contactadas con el mundo moderno de toda la Amazonía. Los Shuar son los conocidos "reductores de cabezas", despectivamente llamados "Jíbaros", que tradicionalmente realizaban las "tsansas", esto es cabezas humanas reducidas mediante un proceso de cocción y secado.

Ellos son los permanentes guardianes, los custodios de la Cueva de los Tayos y de sus secretos subterráneos. Toda su mitología tiene una profunda relación con esas cuevas.

A mediados del siglo XX el investigador húngaro nacionalizado argentino Juan Moricz, quien era una suerte de Indiana Jones moderno -ejemplificó Eduardo- tuvo la experiencia de encontrarse con los Shuar, quienes le hablaron de estas cuevas y eso encendió su curiosidad por conocerlas. Los Shuar accedieron a guiarlo, anticipándole que solo podían llevarlo hasta un determinado lugar, pero no más allá. Es así que Moricz se interna por primera vez en las profundidades del gigantesco laberinto subterráneo de Los Tayos.

Lo más notable es que al salir afirmó públicamente (y hasta en un documento al gobierno de Ecuador) que dentro de esas cuevas había descubierto una biblioteca formada por numerosas láminas de oro puro grabadas en una antigua escritura jeroglífica. Según las referencias de los aborígenes, esas planchas relatarían una historia perdida de la humanidad. 

Poco después el fabuloso hallazgo fue difundido masivamente en el libro "El oro de los dioses" del escritor suizo Erich Von Däniken, y a partir de entonces estas cuevas se volvieron famosas en el mundo. 

Alexis Ruffat.

Fue entonces que miembros de la iglesia de los mormones contactaron a Moricz para organizar una exploración, movidos por unas llamativas coincidencias: En el libro de su profeta Joseph Smith se dice que existe una arcaica historia escrita en jeroglíficos sobre planchas de oro y además la caverna de Los Tayos está en la provincia ecuatoriana Morona Santiago. Y se llamaba Moroni el ángel que se le manifestó a Smith… 

Otra incursión a las cuevas la dirigió el arqueólogo escocés Stan Hall, quien según rumores estaba vinculado a la corona inglesa. En 1976 Hall condujo una importante expedición en la que participaron destacados científicos además del astronauta Neil Armstrong, primer hombre en pisar la Luna, aunque en esta oportunidad no hallaron rastro alguno del tesoro que decía haber descubierto Moricz. 

Eduardo Urrutia destacó que para la ciencia estas cuevas son de formación natural, horadadas por cursos de agua a lo largo de milenios, aunque en las profundidades hay cámaras con paredes lisas y dinteles planos que parecen haber sido pulidos por una antigua civilización.

Eduardo mencionó la trayectoria del Padre Carlos Crespi Croci, un sacerdote salesiano italiano que a principios del siglo XX se internó en la Amazonía Ecuatoriana en misión evangelizadora y logró una relación muy cercana con los Shuar, una etnia con la que muy pocos hombres blancos interactuaban por considerarla "salvaje" en esos tiempos. 

En reciprocidad a la buena disposición del sacerdote, los Shuar comenzaron a regalarle originales objetos antiguos tomados de sitios arqueológicos tapados por la selva, sitios sobre cuya ubicación los shuar guardan el mayor secreto. Entre esos objetos también había láminas metálicas con inscripciones en un lenguaje simbólico desconocido.

Tantas cosas le trajeron, que el Padre Crespi fue formando una importante colección detrás de la iglesia en la misión salesiana de Cuenca. En un confuso episodio su museo se incendió y muchos de los objetos desaparecieron, algunos tenían gran valor histórico, otros parecían ser réplicas o artesanías recientes.

Expone Alejandro De La Barra.

El ingeniero Alejandro De La Barra, quien fue bienvenido a nuestra reunión ya que hace tiempo no concurría, se refirió al relato bíblico de los gigantes que se unieron con las mujeres de la Tierra, las que luego tuvieron hijos que fueron los héroes de la antigüedad, según el Génesis y mencionó hallazgos arqueológicos de restos humanos de gran estatura. Eduardo Urrutia completó diciendo que en la costa sur del Ecuador, cerca de la ciudad de Loja, se han encontrado restos óseos de gigantes, aunque es un hecho poco difundido.

Prosiguió De la Barra contando que el investigador Brian Foster organiza recorridos turísticos para conocer arcaicas ruinas que son testimonio de una avanzada tecnología en tiempos muy remotos, todo lo cual le hace pensar en una cultura global antigua, esparcida en distintos lugares del mundo, con un elevado nivel de desarrollo técnico y científico.

Carlos Vales, a su lado Mabel Costea.

Acto seguido Carlos Vales relató que junto a Orlando Burgos, Javier Stagnaro y Rubén Morales recientemente fueron invitados por la Dirección de Turismo de la Municipalidad de Rauch (Provincia de Buenos Aires) a participar de una Jornada Ufológica en el Salón Blanco del Palacio Municipal, con la presencia del Coordinador de Turismo, Dr. Fermín Gándara Sica y la concurrencia de un importante grupo de vecinos dispuestos a escuchar, hacer preguntas y también compartir sus experiencias personales. Esos relatos espontáneos fueron numerosos y variados, uno de los asistentes mencionó haber tenido más de 20 avistajes en esa zona que compendió en un ordenado catálogo, así como otra persona relató con detalle reiteradas visualizaciones de ángeles acompañadas por premoniciones que se habían cumplido.

Prosiguió diciendo Carlos Vales que los cuatro ufólogos de RIO54 que viajaron a Rauch también pudieron recorrer las ruinas del Castillo San Francisco, próximo a la estación ferroviaria Egaña, un lugar del que se cuentan tenebrosas historias y que ha sido frecuentado por grupos de cazafantasmas, según relató a los visitantes Sergio Bilbao, Coordinador Turístico del castillo. En suma, la visita a Rauch fue una experiencia muy rica e interesante -concluyó.

Rubén Morales, por su parte, resaltó la importancia de que  el Coordinador de Turismo de Rauch, Dr. Fermín Gándara Sica, haya decidido convocar al Café Ufológico RIO54 para esta Jornada, lo que marca un reconocimiento al rol social y cultural que cumplen los cafés ufológicos. Dijo también que esta Jornada Ufológica demostró de manera práctica cómo se puede integrar el tema ovni al circuito de actividades turísticas de una comuna para favorecer la difusión cultural, a la vez que estimular la participación activa de los asistentes. En otras palabras, lo realizado en Rauch nos permite vislumbrar el rumbo de una nueva ufología que saludablemente deja atrás el camino trillado por los mercaderes de misterios, los refutadores seriales y los falsos profetas. 

Mario Lupo y Rubén Morales los convocamos a nuestro próximo encuentro que será el jueves 3 de octubre a las 18,30 en el Restó Autoservicio Bellagamba, de Avellaneda y Eleodoro Lobos, barrio de Caballito. Recordamos que Bellagamba es un local autoservicio, se retira la comida y bebida personalmente, se pasa por la caja para abonar y luego se va a la mesa con la bandeja. 

Para participar del Café Ufológico RIO54 solo se abona la consumición como en cualquier local gastronómico y es necesaria una consumición por persona, también como en cualquier restó. 

Las reuniones no se filman ni se graban y si alguien lo hiciera es bajo su absoluta responsabilidad, eso sí, tomamos unas fotos para ilustrar breves resúmenes como éste. ¡Hasta el jueves 3!