Una vez más, el Café Ufológico RIO54 se reunió el primer jueves de junio en Plagio Club Cultural, de Avellaneda y Eleodoro Lobos, barrio de Caballito, Buenos Aires, espacio al que agradecemos la calidez con que somos recibidos todos los meses.
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| Mario Lupo, Nilva Macedo, Karina López y Walter Vicario. |
Mario Lupo y Rubén Morales abrieron el encuentro para dar la bienvenida a los presentes, en especial a quienes llegaron por primera vez a la larga mesa del café ufológico, como Luis Valle que es ingeniero en electrónica y un apasionado por temas científicos como la astronomía, la física, la astronáutica y los ovnis. Destacó la reciente ponencia del autor argentino Sebastiano De Filippi en la conferencia “Archivos de lo imposible”, organizada por Jeffrey Kripal, decano de la Escuela de Humanidades y de la Cátedra J. Newton Rayzor de Filosofía y Pensamiento Religioso en la Universidad de Rice, institución académica de Houston, Texas, EE.UU.
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| En primer plano, Morales, Nardini y Portalet. |
Luis cuestionó a la muy difundida hipótesis extraterrestre (HET), ya que las manifestaciones de los ovnis incluyen componentes psíquicas, paranormales, culturales, sociales, temas abordados por autores como Jacques Vallée. Dijo que no ha tenido observaciones que puedan considerarse extrañas, aunque sí ha vivenciado esos fenómenos psíquicos de sincronicidad que oportunamente fueron bien descriptos por el psicólogo suizo Carl Gustav Jung.
Claudio Rodríguez también llegó por primera vez a nuestra mesa, aunque había participado en reuniones previas que se hicieron de manera virtual mientras duró la pandemia.
Expresó que los temas que nos convocan nos invitan a despojarnos de certezas, a conocernos mejor como personas, a plantearnos las dudas ontológicas que son propias del ser humano.
Añadió que estando en Capilla del Monte le sorprendió ver una luz que ascendió tras los cerros y luego quedó estática en el cielo.
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| Marcelo, durante su presentación |
En fin, arribó a RIO54 Marcelo Robin, desarrollador web con formación en ingeniería, quien hace unos doce años, junto a varias personas que realizaban un asado en el barrio de Caballito, el mismo barrio donde realizamos nuestros cafés, vieron subir verticalmente hacia el cielo una luz blanca impresionante.
Hechas las presentaciones, intervino Javier Stagnaro citando el paper académico de Diego Escolar referido a sus observaciones en Calingasta, Pcia. de San Juan. Javier amplió que en la región patagónica existe un vínculo entre las actuales observaciones de luces extrañas y las tradiciones mapuches y araucanas, documentado en la bibliografía. Alberto Portalet acotó que en esa zona también son frecuentes los testimonios de pilotos comerciales que realizan vuelos entre Argentina y Chile.
En ese marco volvió a ser mencionado en nuestros encuentros el famoso caso sucedido en el aeropuerto de Bariloche el 31 de julio de 1995. Javier recordó que la comisión de investigaciones de ovnis “semioficial” dependiente del CITEFA (Instituto de Investigaciones Científicas y Técnicas de las Fuerzas Armadas) estaba en plena actividad en la época del incidente de Bariloche, y que siendo integrante de la misma participó en una importante reunión realizada en el Edificio Centinela (Sede de Gendarmería Nacional) donde estaban presentes altas autoridades del Ministerio de Defensa, de la Fuerza Aérea y de Gendarmería, junto a las tripulaciones de los dos aviones involucrados en el incidente.
Posteriormente, el Dr. Rositto (físico integrante de la misma comisión) realizó una pericia del equipo electrógeno del aeropuerto, calificando como “extraño” al fallo que se había producido en el generador.
Una vez más, debemos lamentar que las voluminosas carpetas con los estudios realizados por la comisión “semioficial” del CITEFA jamás se difundieron al público, en tanto hubo encuestadores civiles como Juan Pablo Gómez y Oscar Adolfo Uriondo que hicieron indagaciones paralelas para tratar de acceder a los datos disponibles sobre el "Caso Bariloche".
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| Juan Carlos Spadafora Jr. y Javier Stagnaro |
Javier añadió una información desconocida hasta ahora, y es que en esa misma época operaba otra “comisión oficial ovni” en el Edificio Alas de la Fuerza Aérea a cargo de un comodoro, cuya actividad pasó desapercibida para todo el mundillo ufológico. Cabe aclarar aquí que para esa fecha ya estaba desactivada la "División Ovni" de la FAA que había dirigido el Cap. Ing (R) Carlos Augusto Lima. Y dijo más Javier: Hubo unos visitantes norteamericanos que decían ser representantes de una productora de cine, pero esa afirmación despertó dudas cuando mostraron unas fotos satelitales de Bariloche con una calidad de detalle realmente asombrosa para el año 1995.
Por su parte, Juan Carlos Spadafora Jr. mencionó otra observación aérea sucedida en 1980 de la que se conserva una grabación entre el avión y la torre del Aeropuerto Internacional de Ezeiza, a la que pudo acceder.
En otro órden, Rubén Calabrese mencionó que cuando vivió en Toronto por razones laborales, estableció amistosos intercambios con el respetado ufólogo Stanton Friedman, quien lo contactó porque estaba muy interesado en conseguir cartas celestes del hemisferio sur para localizar con precisión a Zeta Retículi, la estrella que se hizo famosa tras ser mencionada en la abducción de Betty y Barney Hill.
Y esa fue la impronta de la amigable charla que espontáneamente fue tomando el Café Ufológico RIO54 de junio, en su doceavo año de reuniones consecutivas, como siempre con libertad de palabra, agenda abierta y amplitud de criterios.
Recordamos que disponemos de un grupo de Whatsapp que fue creado a iniciativa de los participantes en los meses iniciales de la pandemia para seguir conectados, y al que pueden ingresar solamente los que hayan participado en los encuentros presenciales o virtuales del Café Ufológico RIO54. Los que hayan participado y deseen entrar al Whatsapp, favor enviarnos un mail indicando teléfono con prefijo.
La próxima reunión será el jueves 7 de julio a las 18,30, en Plagio Club Cultural, Avellaneda 399 y Eleodoro Lobos, barrio de Caballito, CABA.
Te esperamos!
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